El día de ayer, miércoles 24 de mayo, se llevó a cabo en dependencias del colegio Domingo Savio, una nueva conmemoración de la Solemnidad de María Auxiliadora, fiesta salesiana, que, además, busca festejar a todas las madres y apoderadas de nuestra comunidad: música, presentaciones artísticas, y convivencias por cursos, fueron algunos de los elementos que adornaron la jornada.

Las celebraciones comenzaron temprano por la mañana, cerca de las 08:30 am, con la realización de un Buenos Días especial para los cursos de enseñanza básica, instancia que fue realizada en el salón Maximiano Ortúzar, y que fue presidida por el padre Juan Paredes Sdb. En paralelo, se realizó también en el templo del colegio, una eucaristía para los niveles de enseñanza media.

Posteriormente, a eso de las 10:30 de la mañana, cerca de 500 madres y apoderadas de nuestra comunidad, asistieron a la especial celebración en su honor, donde un grupo de estudiantes realizó una presentación artística, para luego, observar el show del doble oficial de Elvis Presley. Tras los números artísticos, fue el turno de la rectora del colegio, la señorita Carolina Alfaro, de dirigirse a las madres presentes:

“Estimadas madres y apoderadas, hoy las hemos reunido acá, para decirles que las admiramos profundamente por el rol que cumplen todos los días, amando y acompañando a nuestros queridos estudiantes. Ustedes, son testimonio del amor de María Auxiliadora, y en este su día, déjense amar profundamente, y no solo por sus hijos, sino también, por Dios”, indicó.

A continuación, las madres presentes se trasladaron hasta el templo del colegio, para participar en una eucaristía conmemorativa en honor a María Auxiliadora. La ceremonia, estuvo presidida por el director de la presencia salesiana en la Zona Sur de Santiago, el padre Osvaldo Valenzuela Sdb, quien señaló:

“Qué bonito es descubrir que una madre es alguien que cala muy hondo en la vida de las personas, es tan potente el vínculo que se forma entre madres e hijos, que deja huella para toda la vida. Gracias, porque al igual que María, ustedes siempre están atentas a las necesidades de los demás, porque ante su presencia no hacen falta las palabras, solo con su amor y conocimiento es suficiente”.

Tras esto, y para finalizar la jornada, las madres y apoderadas presentes, se trasladaron a cada una de sus salas, para realizar un compartir fraterno en compañía de sus hijos y educadores.